Verónica Huilipán es una líder mapuche argentina, activista, feminista y gran militante por los derechos de las mujeres y los pueblos originarios. En 2006 fue la primera mujer elegida como werkén (vocera) de la Confederación Mapuche de Neuquén (CMN), y desde allí ha protagonizado conquistas en cuestiones territoriales, institucionales, y ambientales en esta provincia. En 2008 se convirtió en la primera dirigenta en ocupar una Secretaría de Relaciones con los Pueblos Originarios de una central obrera como la CTA. Tiene, además, una activa participación internacional a través del Enlace Continental de Mujeres Indígenas de las Américas (ECMIA).

Siendo muy joven, Verónica fundó la primera radio comunitaria barrial mapuche, la FM Hueney. Años después, basándose en esa experiencia, creó junto a sus compañerxs la primera radio AM indígena en Argentina: la AM 800 Wajzugun, que desde 2006 comunica todo el circuito mapuche de la región, incluyendo poblaciones chilenas, y representando un fuerte elemento de lucha por la identidad de su cultura.

A partir de los años 90, en la Argentina se recrudeció la venta de la tierra originaria para la entrega de recursos estratégicos, por lo cual lxs mapuches profundizaron la lucha por la defensa territorial. Verónica encabezó el reclamo contra la petrolera (en ese entonces trasnacional) Repsol YPF, que, además de ocupar el territorio tradicional mapuche de Loma la Lata, contaminó con metales pesados suelos, ríos y aguas subterráneas consideradas sagradas para la comunidad. Así, en 2002 el pueblo demandó a la empresa por 445 millones de dólares en concepto de daños que sufrieron en su territorio como consecuencia de la explotación hidrocarburífera. Verónica nuevamente marcó un precedente cuando denunció el caso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA: fue la primera delegada de pueblos originarios en hacer una representación de caso en la CIDH.

Verónica sostiene que los crímenes en contra de los pueblos indígenas, especialmente contra las mujeres, son una cuestión ancestral, normalizada en la Argentina al punto de la invisibilización. Las distintas formas de violencia contra las mujeres originarias son temas estructurales y están atravesados por el despojo territorial, la criminalización, el empobrecimiento material, la colonización y la discriminación. En una acción clave para luchar contra esta problemática latente, en 2020 fue designada Coordinadora de Abordaje de la Violencia por Razones de Género contra Integrantes de Pueblos Indígenas dentro del Ministerio de Mujeres y Géneros de nuestro país. Verónica plantea que en Argentina no hay un movimiento de mujeres indígenas organizado, y que parte de su trabajo desde este lugar apuntará a que las mujeres de pueblos originarios encuentren representación de sus problemáticas en este espacio.

Sobre el motivo de su incesante defensa de la tierra, Verónica subraya la importancia del territorio porque en él radica la lógica filosófica de la existencia mapuche. Como personas, su cultura se considera parte de un todo único e inescindible, que genera condiciones para la existencia de cada vida. Y son pares en ello las montañas, el río, los lagos, las plantas, los animales, las personas, el aire y la lluvia. “En nuestra lengua mapu significa tierra, y che, gente. Somos el pueblo mapuche: gente de la tierra”.