"Lo que funciona bien es preferible a lo que simplemente es bello, porque es lo que perdura."
Ray Kaiser Eames nació en 1912 en la ciudad de Sacramento en California, Estados Unidos. Fue una artista, diseñadora, arquitecta y realizadora de cine.
Empezó estudiando pintura abstracta en los años ‘30. En septiembre de 1940 inició sus estudios en la academia de arte Cranbook en Michigan, donde conoció a Charles Eames quien se encargaba del departamento industrial. Se casaron en 1941 y se mudaron a Los Ángeles, donde comenzaron su carrera como diseñadores.
Su principal motivación fue lograr la producción en serie de mobiliario de diseño y ergonómico para satisfacer las necesidades de una sociedad estadounidense afectada consecutivamente por la Gran Depresión de los años treinta y posteriormente por la segunda guerra mundial.
Pronto se dieron cuenta de que debían usar materiales más económicos para que sus objetos estuvieran al alcance de toda la población, y comenzaron a diseñar utilizando plástico, más ligero y barato que el metal y más moldeable que la madera contrachapada. Así, entre 1945 y 1978 pusieron en el mercado más de 40 diseños totalmente acabados, todos ellos caracterizados por una intensa búsqueda del equilibrio entre la perfección técnica y formal, entre estética y ergonomía.
A partir de 1950, una vez adquirieron gran reconocimiento en los EE.UU., su trabajo se diversificó entre la arquitectura (diseñaron y construyeron su propia vivienda en 1949), la investigación y desarrollo de muebles con otros objetivos más allá del bajo coste, como la Wire Mesh Chair (1951) –la primera silla 100% metálica producida en serie–, la Long Chair and Ottoman (1956) o la serie Aluminium Group (1958); y, por último, la producción de películas, cortometrajes, pintura o cualquier medio que diera rienda suelta a su creatividad.
Ray Eames tuvo que luchar contra una sociedad machista que reservaba a la mujer el papel de buena esposa. Aún así logró desarrollar un gran talento para las artes y la decoración, y en 1933 tenía claro que quería explorar su capacidad artística y para el diseño. Su desbordante creatividad complementó el talento de Charles, pero Ray nunca recibió el reconocimiento que merecía y siempre se mantuvo a la sombra de su esposo.
Ray Eames murió en Los Ángeles en 1988, diez años después de Charles.